El pediatra Emilio Villa Alcázar apareció hace unos 12 años por el Icomem, recomendado por sus amigos Gabriel Núñez, presidente de Uniteco Profesional, Carlos Hernández, asesor jurídico del Colegio, y Melchor Álvarez de Mon, presidente de la Comisión Científica y de Investigación, con los que, explicó, colaboraba en diversos proyectos, como la Revista Calidad y Riesgo, Qualitas Qualitatis, AFA Abogados...
El pediatra acudió entonces a presentar su empresa, Medigest Consultores, que comercializaba 3 productos: un programa informático llamado Axón, la Red Sinapsis de historias clínicas y la guía Medimecum. De esta forma llegó a algún tipo de acuerdo económico con el Icomem para ofrecer estos productos a los colegiados, aunque ha sido imposible conocer qué interés tienen los médicos en ellos y la cantidad que el doctor Emilio Villa se ha venido embolsando por los mismos. De hecho, para informarse de estos productos, los colegiados tenían (y tienen) que dirigirse a los empleados de Uniteco Profesional desplazados en el Icomem, y no a personal del Colegio.
Más adelante, en 2010, el doctor Villa solicitó reunirse con la Junta Directiva del Icomem para ofrecer además su sistema de Receta Médica Online (Medimecum Ereceta). A la Junta Directiva le gustó la idea, pero le hizo saber que antes había que transformar la página web colegial, que se había quedado obsoleta, y adaptarla a la Ventanilla Única. Emilio Villa afirmó entonces que él también era capaz de realizar esas tareas, aunque a sus colegas más próximos les desveló que no tenía ni la experiencia, ni los medios técnicos ni humanos necesarios en esos momentos para llevarlas a cabo. Baste recordar que Medigest está domiciliada en la consulta privada del pediatra -General Perón, 26-Esc.2-3ºA- y que sólo atiende al público vía teléfono y correo electrónico.
Sin embargo, el doctor Villa no cejó en su empeño y volvió a presentar un proyecto que incluía las áreas antes descritas a la Junta Directiva del Icomem, asociado para ello con sus amigos Ángel García, director de la empresa Xtragames (especializada en juegos online) y Rafael Alonso (prejubilado y consultor con su empresa ERB Astania). Resultado: la Junta Directiva confió en la capacidad de Medigest y el 5 de mayo de 2010 firmó un contrato con esta empresa, encargándole la creación de un nuevo portal web y su adaptación a la Ventanilla Única y la Receta Médica Online por el “módico” precio de 300.000 euros.
Tan sólo unas semanas más tarde, en cuanto el personal informático del Icomem comenzó a trabajar con ese equipo de Medigest, se dio cuenta de su incapacidad y carencias para cumplir los plazos y llevar a buen puerto el proyecto: los problemas eran continuos, se producían múltiples errores, copiaron la página trabajada por el Icomem para el Colegio de Médicos de Valencia, se negaban a entregar al Colegio el código fuente… Hasta el punto de que el Colegio tuvo que solicitar una auditoría informática independiente que confirmó las peores sospechas y recomendó a la Junta Directiva rescindir el contrato y comenzar a trabajar con compañías realmente profesionales.
Aunque el Icomem ya había pagado entonces alrededor de 180.000 euros a Medigest, a mediados de 2011 no tuvo más remedio que recurrir a dos compañías fiables para solucionar el caos informático y de servicios al que le había llevado la empresa de Emilio Villa: Pixelware para la Ventanilla Única y Metadrop para el diseño de la página web, con las que se comenzó a trabajar con absoluta eficacia y normalidad (y a unos precios muy por debajo de los presupuestados por Medigest), logrando un alto nivel de calidad para el portal web www.icomem.es
El pediatra Emilio Villa reaccionó entonces de forma airada contra la Junta Directiva y tuvo suerte. Se implicó aún más intensamente con Uniteco Profesional para presentarse a las elecciones del Icomem 2012, en la candidatura financiada por la correduría de seguros, y en mayo de ese año salió elegido como secretario general del Icomem.
Desde entonces hasta el día de hoy, personas cercanas a la actual Junta Directiva del Icomem aseguran que el pediatra se ha centrado en utilizar el Colegio en beneficio propio. Y resumen algunas de sus acciones:
- Como primer paso, consiguió que la Junta Directiva despidiera a Jorge Cobas (responsable de Informática) y a Sonsoles Vázquez (responsable de la Página Web), los dos empleados del Colegio que conocían en profundidad sus irregularidades
- Ha contratado como asesor informático a su amigo Rafael Alonso (ERB Astania)
- Ha rescindido el contrato con Pixelware y Metadrop, y ha vuelto a contratar a empresas vinculadas a él (Medigest y Xtragames) para el área de Informática
- Ha contratado la Receta Médica Online a otra empresa vinculada con él: Plataforma de Prescripción Segura S.L.
¿No deberían conocer los médicos colegiados de Madrid las cantidades que ha facturado Emilio Villa por todos estos conceptos desde febrero de 2008 hasta marzo de 2012 -que según diversos documentos asciende a 656.360 euros- y lo que viene cobrando indirectamente desde que es secretario general del Icomem?
En primer lugar, porque su puesto ya está suficientemente bien remunerado y no parece muy ético que tenga otros intereses económicos en el Colegio. Y, en segundo lugar, porque según diversos expertos consultados, la actual página web colegial es de una calidad ínfima, está plagada de errores y ha perdido todo el repositorio histórico (gráfico y documental) de la entidad colegial. Asimismo, resulta llamativo que la Ventanilla Única siga sin estar plenamente operativa, y que los médicos usuarios indiquen que su sistema de Receta Médica Privada es caro y funciona de una manera muy deficiente.
Alfonso Núñez de Peralta
Periodista