Ser médico es una profesión con un gran componente vocacional y en esa faceta he cumplido la primera premisa ya que fué mi determinación desde que recuerdo y no me lo he replanteado nunca más a lo largo de mi vida profesional. Repetiría.
Presidente: Miguel Ángel Sánchez Chillón |
Complementé, o mejor enriquecí, el desarrollo de mi carrera profesional en el mundo de la cooperación, desde el trabajo “en el terreno”, hasta responsabilidades en la dirección de ONGs y Fundaciones (Médicos del Mundo y Fundación Antisida) y siempre pensaré que es ahí donde mejor se expresa la relación del médico con la medicina y la sociedad a la que servimos. Ningún médico debería renunciar a ello por el simple hecho de que es ahí cuando realmente nos sentimos recompensados y donde podemos vivir la inmediatez del acto médico.
Creo que podría decir que lo dejaría todo por sentirme MEDICO cooperante.
En la faceta científica he sido tutor de residentes y he publicado o participado en libros, artículos, congresos, guías, planes estratégicos, comisiones científicas, cursos, etc; tanto en el ámbito de la Atención Primaria como de la Hospitalaria. Convencido estoy de que es nuestra obligación formarnos, formar y compartir el conocimiento con nuestros compañeros y residentes.
Y, por último, recalé en el Ilustre Colegio de Médicos de Madrid, casi sin proponérmelo pero con el mismo espíritu de servicio y de mejora que va implícito en el ADN de los médicos. No fué fácil la andadura inicial pero, como es norma general en mi vida, creo que hay que trabajar por mejorar las cosas, reconducir lo torcido y ofrecerse a los demás en la medida de nuestras capacidades. Desdeñar la posibilidad de devolver al Ilustre Colegio de Madrid el peso de su historia, el orgullo de pertenecer a la profesión más bonita y retomar el papel que la ciencia médica debería tener en la sociedad me parece que es justificación suficiente para invertir un corto periodo de tiempo de nuestras vidas, que ya con eso nos sentiremos recompensados.
Belén Padilla Ortega
¿Por qué me hice médico?, la respuesta es
sencilla “simplemente porque me gustaba”.
Mi nombre es Belén, aunque muchos me
llama cariñosamente por mi apellido, Padilla. Soy médico gracias a mucha gente,
en especial gracias a mis padres. Estudié en Valladolid, mi ciudad natal, aprobé
el MIR y me vine a Madrid para hacer la especialidad de Microbiología en el
Hospital de la Princesa, fui la primera residente de esta especialidad en ese
hospital, todo un honor. Recuerdo la época de la residencia como una de las mas
gratificantes a nivel profesional, eso sí, de una gran intensidad. Durante la
residencia aprendí lo que es la enfermedad y lo que eso supone en la vida de
los pacientes y en la nuestra. Entendí la importancia de ser médico, no solo se
trata de curar, si no de cuidar y aliviar y la recompensa es enorme, creedme.
Vicepresidenta: Belén Padilla Ortega |
Durante mi vida profesional he tenido la
suerte de trabajar al lado de grandes profesionales y hacer buenos amigos. He tenido el privilegio de ver nacer dos
grandes pandemias, el VIH y la hepatitis C, y también de disfrutar de su
solución o curación, ¡todo un lujo!.
Ser médico me ha enseñado la vida en los momentos
difíciles de la enfermedad, me ha enseñado a superarme profesional y personalmente,
gracias a mis pacientes y a mis compañeros.
Siempre he trabajado en la Sanidad
Pública y soy firme defensora del derecho a la salud para todos con una gestión
honesta y profesional.
Todo esto me hace amar mi profesión y
defenderla de todos los que la quieren manipular y denostar, ser médico es algo
grande.
Angel Sanz-Vírseda de la Fuente
En nuestra profesión así como en nuestra vida, creo que nos movemos en el delicado equilibrio entre la capacidad, la ética y el deseo: lo que “puedo” hacer, lo que “debo” hacer y lo que “quiero” hacer.
Mi motivación para estar en esta candidatura como tesorero, combina estas tres variables de manera ponderada.
Porque lo he pensado de forma serena y realista, sé que no es un compromiso fácil. Todos somos conscientes del desapego que muchos médicos hemos desarrollado hacia nuestro Colegio y también yo soy consciente de que tengo que continuar con mis responsabilidades laborales, que no son pocas.
Tesorero: Dr. Angel Sanz Vírseda de la Fuente |
Pero éste es el reto, mi reto personal. Puedo, debo y quiero asumirlo, como en otras ocasiones durante mi trayectoria vital.
Afortunadamente, el destino me ha permitido a lo largo de los últimos 25 años, conocer, analizar y disfrutar proyectos diversos, ricos y motivadores. Si tuviera que seleccionar una palabra para definir la clave del éxito en todos ellos, no tengo duda alguna: esa palabra es compromiso; el mismo compromiso que estará presente si está candidatura es la más votada por los médicos de Madrid.
Además, para no engañar a nadie, también puedo, debo y sobre todo, quiero, seguir desarrollando mis inquietudes profesionales y personales.
Entre las primeras, los valores en la profesión médica, los modelos asistenciales y la gestión clínica.
Y entre las segundas, tan necesarias para seguir vivo, la naturaleza en su concepto amplio, la historia de las civilizaciones y conocer disfrutando entornos y lugares diferentes a mi medio habitual.
Termino como empecé, reflexionando sobre la capacidad, la ética y el deseo. Ojalá los colegiados de Madrid terminemos convencidos de que nuestra profesión, nos permite decir sin complejos que puedo ser médico, debo ser médico y además, quiero serlo.
José Mª Morán LLanes
Creo que me hice médico por varios motivos: mi afición desde pequeño a las ciencias biológicas así como una educación humanista, de ayuda a los demás y de valoración de lo social, en la que la figura del médico clásico aunaba estos conceptos y despertaba mi admiración.
Secretario: José Mª Morán Llanes |
Durante la carrera y al terminar me atrajo especialmente la anatomía patológica especialidad en la que hice mi tesina de licenciatura y publiqué numerosos trabajos, bajo la dirección y enseñanzas de mi tío y maestro Felipe. Pero era una época de difícil salida profesional y ahí vino la influencia de mi padre abogado, funcionario técnico, gestor e inspector educativo, quién me influyó al convocarse las oposiciones de Médico Inspector para que las hiciera, por seguridad laboral y por conocer mi atracción por los aspectos organizativos. Así lo hice, y llevo más de treinta años de ejercicio profesional en el que, sin dejar de valorar enfermos y casos de pacientes a diario, he tenido la oportunidad de desarrollar mi otra gran vocación como gestor de la Administración en diferentes destinos de la sanidad pública hacia la que siento una gran lealtad.
Por otro lado, y no desligado de lo anterior, siempre he tenido una fuerte inclinación asociativa y de liderazgo que me ha hecho participar en numerosas asociaciones de carácter profesional (más recientemente, presidente de la asociación de Inspección Sanitaria de Madrid y vicepresidente de la federación española) y social, especialmente cercanas a la sanidad. En este sentido siempre pensé que el "Colegio de Médicos" era menos de lo que yo y muchos compañeros pensábamos que debiera de ser. Esta ha sido la razón de animarme a participar con Miguel Ángel, Asun y tantas otras compañeras y compañeros entusiastas y grandes profesionales a tratar de hacer del ICOMeM algo mejor de lo que es, al servicio de los médicos y de la sociedad.
Asunción Rosado López
Soy médico de familia casi por casualidad, porque lo que realmente quería ser era internista. Sin embargo, con el transcurso de los años y a pesar de lo mucho que me gustaba el trabajo hospitalario, no dejo de dar gracias todos los días por haber escogido Medicina Familiar y Comunitaria.
Vicesecretaria: Asunción Rosado López |
Me apasiona mi especialidad y desde hace años me empeño en darle un contenido diferente al que muchos nos quisieron adjudicar. Me embarqué en uno de los proyectos más gratificantes de mi vida profesional, la lucha contra la inmensa burocracia generada (o no) en las consultas de los médicos de Atención Primaria, y esa batalla, de forma indirecta, me introdujo en la vida colegial al pasar a formar parte de la Mesa de Atención Primaria del ICOMEM.
En el año 2012 me embarqué con un fantástico grupo de colegas en las elecciones para la Junta Directiva del Colegio, proyecto coordinado y liderado por Miguel Angel Sánchez Chillón. No ganamos y no conseguimos lo que por entonces era nuestro objetivo: trabajar desde dentro del Colegio por la consecución de los fines que le corresponden a la Corporación y que los médicos no hemos percibido en los últimos años.
Sin embargo, he comprobado que trabajar desde fuera también es satisfactorio y así lo he hecho hasta la actualidad, en la medida de lo posible y con las pocas herramientas de que disponía, apenas un blog y una cuenta de Twitter. Ni es el momento ni quiero sacar trapos sucios sobre el pasado, ahora es tiempo de mirar adelante y ser positivo.
Me ilusiona sobremanera cambiar el rumbo del colegio y conseguir que la desafección de los médicos de Madrid dé un giro; estoy convencida de que se puede hacer. Que los médicos no pensemos que el Colegio de Médicos es sólo el peaje que hay que pagar para poder ejercer nuestra profesión, sino que es la institución que nos reúne a todos, que debe velar por garantizar la dignidad que nos corresponde, la práctica ética de la profesión y la salud de los madrileños
Ojalá fuéramos capaces de transmitir a los colegiados de Madrid que esta Casa es la suya, su referente para la ciencia y el humanismo médicos
Estudié la
carrera de Medicina en la Facultad de Murcia en los años 80, en un período
vital apasionante y entrañable. En 1990 vine a Madrid a cursar la especialidad
de Neumología en el Hospital Universitario de La Princesa, y aquí he trabajado
desde entonces, rodeado de un formidable grupo humano y profesional. Ser
neumólogo en este hospital centenario
acrecienta en mí cada día el valor de la pasión y la honestidad, del compromiso
con nuestros pacientes y nuestras instituciones, de la rebeldía ante lo
injusto. Eso es “el espíritu de la Princesa”, que nos hizo iniciar las protestas y
movilizaciones contra unas decisiones políticas arbitrarias, y que nos demostró
a todos el camino para lograr cambiar aquello que no es racional, sensato ni
justo.
Vocal de Hospitales: Francisco Javier García Pérez |
Pero la
medicina no es todo en mi vida. Fernando Savater escribió una vez que
“aburrirse viene de burro”, y yo no me aburro. Me apasiona el cine, la lectura,
la música clásica y el fútbol (mi único conflicto de intereses es que soy
seguidor incondicional del Atleti).
Cuando me
embarqué en este proyecto del Colegio de Médicos hace tres años, el primer
sorprendido fui yo: por qué algo tan lejano a nuestro quehacer diario me
interesaba ahora. Y descubrí y aprendí con estos amigos y compañeros que
integran y apoyan esta candidatura que no podemos permanecer impasibles ante el
deterioro progresivo de esta institución; los médicos de Madrid necesitamos una
nueva época en el Colegio y exigimos una
gestión rigurosa, transparente e ilusionante.
Ignacio Sevilla Machuca
Me piden un perfil desenfadado y breve y creo poder resumirlo con pocas palabras: soy médico de familia y me siento orgulloso de serlo.
Comprometido con mis pacientes, creo ser buen compañero y honesto con mi empresa ( Sermas) y el entorno laboral.
Tengo ilusión y buen animo, ganas de mejorar las cosas y si me caracterizo por algo es por la constancia; estar cerca del que lo necesita y trabajar con él.
Borja Castejón Navarro
Me considero un apasionado por la medicina en todas sus vertientes. Me forme en la Universidad Miguel Hernández, en mi Alicante natal, para marchar después a Madrid en busca de la aventura que supone hacer el MIR en una ciudad así. Actualmente me encuentro formándome como Angiologo y Cirujano Vascular en el Hospital Ramón y Cajal, donde día a día disfruto de la cercanía que me permite mi profesión, como médico y cirujano, establecer con mis pacientes. Compagino esta labor con actividades de representación en organismos docentes dentro y fuera de mi hospital, y con la Investigación, habiendo participado en instituciones como el CNIC o el IRYCIS en diferentes proyectos.
Vocal de Médicos en Formación: Borja Castejón Navarro |
Estar inmerso en el periodo MIR te da una perspectiva de como funciona la formación especializada hoy en día, de sus carencias y que debería ser para poder ofrecer el mejor servicio a nuestra sociedad. Por eso, desde mi periodo de estudiante he intentado cambiar el mundo que me rodea para que sea un poco mejor, desde las instituciones que nos ofrece la Universidad, o recientemente, como miembro de la Comisión Nacional de la Especialidad de Angiologia y Cirugia Vascular.
Para mí, el Colegio de Médicos no debe ser solo una institución caduca y opaca a la que pagar una cuota por poder ejercer. Es mucho más . Debe ser nuestro foro natural, nuestra casa, la de todos los médicos. Y por supuesto, debe ser el garante de una formación de calidad en nuestra comunidad. Los residentes somos la base sobre la que se levanta la asistencia sanitaria de este país, y ademas somos el recambio generacional. Por tanto debemos ocupar nuestro sitio en el Colegio de Médicos, nuestra casa.
Paula Chao Escuer
Vocal de Médicos Titulares y Rurales: Paula Chao Escuer |
Ricardo Angora Cañego
Soy médico por convencimiento, por la propia esencia de la
profesión de contribuir a la promoción de la salud de mis conciudadanos. Porque
considero la salud como un valor básico de las personas sobre la que se puede
construir y desarrollar el resto de nuestras potencialidades y aspectos
vitales.
Ricardo Angora Cañergo. Vocalía de Promoción de Empleo y Cooperación INternacional |
Los médicos tenemos la ventaja de contar con una profesión
que nos permite estar en contacto con la parte más humana de nuestros vecinos
de ciudad, de país, continente o planeta. Este aspecto de la profesión es el
que me impulsó hace años, junto a muchos otros, a formar parte de la gran
familia humanitaria y a dedicarme como cooperante en tareas solidarias para
prestar ayuda a quienes se encuentran en situación de vulnerabilidad y sufren
las consecuencias de conflictos armados, catástrofes naturales, hambrunas o
epidemias. Más allá a quienes ven vulnerados a diario sus derechos y sufren
injusticias.
Tras años de experiencia, hoy se que no podría haber hecho otra
cosa, y me siento satisfecho por contribuir, a través de la práctica de la
medicina, en el ámbito de la salud mental, al bienestar de nuestra sociedad.
Esta determinación es la que me mueve, en este momento de
mi desarrollo vital, a dedicar mis energías para contribuir a potenciar nuestra
profesión en el territorio madrileño. Para esto tengo la suerte de formar parte
de un gran grupo de comprometidos y entusiastas compañeros, liderado por Miguel
Ángel Sánchez Chillón que pretende, ante todo, dignificar nuestra profesión.
Un proyecto entusiasta apoyado por numerosos colegas desde
la base, con la aspiración de fortalecer la unidad de todos los colegiados y
hacer de este Colegio la casa común de todos los médicos de Madrid.
Pablo Lázaro Ochaita
Soy especialista en Dermatología y mi vida profesional se ha
desarrollado fundamentalmente en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid donde llegué
a la Jefatura de Servicio.
Vocal de Ejercicio Libre: Pablo Lázaro Ochaíta |
Actualmente me dedico en exclusiva al ejercicio libre de la
profesión como Jefe del Servicio Dermatología de la Clínica La Zarzuela.
En otras facetas de la profesión me he dedicado a los
aspectos científicos, tanto a la publicación de artículos o libros, la docencia
universitaria y , desde el punto de vista organizativo, dentro de la Junta
Directiva de la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas.
El Colegio de Médicos tiene un papel fundamental en defensa
de los intereses de los médicos que ejercen por cuenta propia y es desde ahí
donde vamos a invertir los esfuerzos en mejorar todas las condiciones que
rodean a esta especial faceta de la profesión.
Julio Bonis Sanz
"Dijo el polifacético Letamendi que "el médico que solo medicina sabe, ni medicina sabe" y este puede ser un buen resumen de cómo he entendido siempre nuestra profesión.
Desde que tengo recuerdos siempre dije que quería ser médico y más concretamente médico de pueblo. No tener médicos en mi familia seguramente influyó en esa anómala elección vocacional.
Estudié la carrera en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria aunque ya entonces mi espíritu "letamendiano" me hacía ser lo que ahora llamarían un estudiante de medicina "friki". Compaginé así mis estudios de Medicina con los de Ingeniería Informática por la UNED, la pertenencia a una compañía de teatro de la universidad, la organización del único equipo de la liga nacional de debate universitario que no estaba conformado por estudiantes de derecho y la fundación de una pequeña empresa con tan solo 20 años.
Con esos antecedentes no es de extrañar que al acabar la carrera en vez de encerrarme en una residencia en Oviedo para prepararme el MIR aceptara mi primer trabajo en un laboratorio de bioinformática en Barcelona y me dedicara a analizar el genoma humano con la ayuda del ordenador.
Tras esos tres años me volvió la morriña por atender pacientes así que me vine a Madrid a hacer el MIR de Medicina Familiar y Comunitaria. Disfruté de aquella época como "un enano" y el último año pude practicar la medicina por la que siempre sentí vocación con un cupo estable de pacientes.
Sin embargo acabada la residencia vinieron los tiempos de los contratos basura y el maltrato laboral por parte de la Administración. Aguanté un año y medio como suplente de atención primaria mientras hacía un MBA en IESE Business School hasta que acepté un contrato indefinido en un departamento médico de la industria farmacéutica.
Mi paso por "la industria" me permitió ver nuestra profesión desde un punto de vista distinto y me hizo entender la importancia que tiene el profesionalismo médico más allá de la práctica clínica asistencial.
Posteriormente dejé la industria para hacer un master en epidemiología y salud pública en Londres (LSHTM), tras lo cual volví a Madrid para casarme, tener dos hijos y construir una familia, tarea a la que dedico la mayor parte de mis energías desde hace 3 años. Desde entonces trabajo en la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios de nuevo delante de un ordenador.
Al principio cuando me ofrecieron formar parte de esta candidatura tuve mis dudas. Como mi mujer trabaja de enfermera a turnos, lo que incluye tardes, noches y fines de semana casi todo mi tiempo fuera del trabajo lo tengo que dedicar al cuidado de los niños. Para las parejas de mi generación compaginar trabajo y familia es como un juego de malabares y mantener en el aire cada nueva pelota que se añada en forma de responsabilidad, por muy pequeña que parezca, requiere de grandes esfuerzos. Por otra parte nunca me ha atraido "la política".
Angel Oso Cantero
Fuí vocal de Jubilados entre los años 2004 y 2012. Conseguí hacer del Colegio un Punto de Encuentro, o Club del Médico Jubilado, al desarrollar una intensa labor de convivencia cultural y de ocio, pero también reivindicativa de los intereses económicos y sociales de los médicos jubilados.
En este capítulo, cabe destacar:
1-La firma del primer Convenio, con la Comunidad de Madrid, para la utilización de las Recetas Oficiales de la Sanidad Pública,
2.- La pugna por la supresión del tope de las pensiones en colaboración con otras Asociaciones de Pensionistas;
3.- El rechazo del copago farmacéutico y sanitario.
4.- La defensa de los derechos de los médicos de Asistencia Médica Farmacéutica-Accidentes de Trabajo.
En el terreno cultural y de ocio, desarrollé una intensa actividad atrayendo al Colegio la colaboración de la Asociación Española de Médicos Escritores y Artistas, apoyando el desarrollo del Aula Lúdica, organizando excursiones y viajes de carácter cultural y gastronómico y, en general, promoviendo la relación y convivencia entre los compañeros.
Pero un aspecto en el que no pude alcanzar mis objetivos, fue el de la Atención Sanitaria al Médico Jubilado. El problema del médico que ha trabajado durante muchos años en un hospital y nadie lo reconoce pasado un tiempo de su jubilación.
Otro tema que he trabajado desde mi reciente cargo de Representante Nacional de Médicos Jubilados en la OMC y que ha cristalizado en el Colegio de Madrid con la promesa de la firma de un Convenio entre el ICOMEM y la Consejería de Sanidad para desarrollar el Programa Nacional de Apoyo a la Atención Sanitaria del Médico Jubilado, aprobado en el Consejo General de Colegios de Médicos (CGCOM)).
Gracias a todos y especialmente a Angel del Oso, que de su mano he conocido mejor ésta candidatura, que es la que mejor recoje una visión amplia de la sanidad , sin olvidar la tan importante sanidad Pública, cuyo magnífico nuivel de formación no existiría si no tuviesemos una población a la que atender obligandonos a mejorar en nosotros mismos en el sentido más amplio que el término "profesionalews médicos", puede y debe seguir recogiendo.
ResponderEliminarSuerte
M Teresa Espiga
por último, recalé en el Ilustre Colegio de Médicos de Madrid, casi sin proponérmelo pero con el mismo espíritu de servicio y de mejora que va implícito en el ADN de los médicos. https://doctorariobo.com/durante-casi-una-hora-camino-por-senderos-estrechos-traves-de-la-selva/
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